Historia de la Filosofía 2 BACHILLERATO

De la teología a la ciencia los seres humanos y, por tanto, se complementan. Son dos dominios distintos en los que podemos encontrar distintos tipos de verdades respectivamente: – Por un lado, la filosofía, como ciencia del orden natural cuyo maestro es Aristóteles. Tomás se ocupó de amplias cuestiones de tipo científico, en las que aplicó la experiencia entendida como observación de los hechos. Al haberse dedicado a la geografía, la astronomía, la mineralogía, la alquimia, la medicina, la zoología y la botánica, se le considera un naturalista, es decir, un científico. A este ámbito pertenecen las verdades de la razón, a las que se llega a través de «la luz natural de la razón» y que no han sido reveladas. A partir de la observación y la experiencia, la razón natural puede probar, por ejemplo, que Dios existe, pero no puede probar la Trinidad, la Encarnación o el Juicio Final. Todo aquello que sea demostrable mediante la razón natural, está de acuerdo con la fe cristiana. Las verdades filosóficas no son contrarias a la fe. Y en el caso de que lo fueran, deberíamos revisarlas. – Por el otro, la teología, encargada del orden sobrenatural. Al dotar a la teología de cierta independencia, renovó esta ciencia. En este ámbito encontramos las verdades de la fe, verdades estrictamente teológicas conocidas mediante la adhesión incondicional a la palabra de Dios, que ha sido revelada. Son de origen sobrenatural. Por ejemplo, que Dios es uno y trino (la Trinidad). Las verdades de la fe deben ser aceptadas por los filósofos como «artículos de fe». Pero estas no van a ser contradictorias con la razón. Tomás confía en que la razón, explorando libremente, no va a encontrar incompatibilidades con la fe. Existen también verdades comunes a la teología y a la filosofía, que han sido reveladas pero que también se pueden alcanzar mediante la razón. Estas verdades comunes son consideradas como preambula fidei, prolegómenos para la fe, es decir, sirven para creer en Dios. Por tanto, teología y filosofía, fe y razón, con métodos diferentes, llegan a una misma verdad. Fe y Razón. Museos Vaticanos. Relación entre fe y razón, según Tomás de Aquino Fe Razón • La teología como ciencia del orden sobrenatural (de Dios) • Influencia de Agustín de Hipona • Verdades de la fe • Conocimiento de la verdad a través de la adhesión a la palabra revelada • Deben ser aceptadas por el filósofo como «artículos de fe» (incuestionables) • Teología revelada • La filosofía como ciencia del orden natural (de la naturaleza) • Influencia de Aristóteles • Verdades de la razón • Conocimiento de la verdad a través de la «luz natural de la razón» (no revelada) • Si son contrarias a la fe, hay que revisarlas • Teología natural: elaborada por la razón • ¿Existe Dios? Tomás distingue entre la teología revelada, aquella que parte del dogma y que no requiere de mayor justificación, y la teología natural, la que parte de la razón para ascender hasta la revelación. En el ámbito de la teología natural, partiendo del orden natural y de la finitud del hombre, el dominico considera que la reflexión debe comenzar a partir de lo que se le da en la experiencia sensible. Todo conocimiento empieza con la experiencia sensible, pero esta no es el límite o fin del conocimiento, ya que asentándose en ella se puede proceder a remontar los «grados de abstracción» y conocer las especies, las ideas, etc. abstraídas de lo sensible. Tomás de Aquino niega que tengamos una idea innata de Dios, nadie sabe lo suficiente de Dios como para conocer plenamente su esencia. Por tanto, descubrimos a Dios a través del mundo que conocemos (a posteriori) y no a partir de su concepto (a priori) tal y como habían defendido Agustín de Hipona y, posteriormente, Anselmo de Canterbury con su conocido argumento ontológico. A Dios llegamos a través de un proceso de prueba. • En la Suma teológica, Tomás desarrolla las conocidas como cinco vías mediante las que podemos conocer a Dios por la «luz natural de la razón». Estas vías consisten en demostrar la existencia de Dios partiendo de la experiencia sensible y aplicando el principio de causalidad a las cosas observadas. Al observar la naturaleza, si consideramos el mundo como un orden admirable de fines y medios, hay que concluir que debe haber una causa última que es Dios. Por tanto, Dios puede ser demostrado por la razón humana. A partir del conocimiento sensible de la naturaleza, del efecto, podemos remontarnos a Dios, la causa. Por esta misma razón, Tomás rechazaba el dogma de la virginidad de María, ya que no puede haber un efecto (el embarazo) sin una causa. Sus textos en torno a este tema fueron censurados por la Iglesia durante mucho tiempo. 165 8 Diálogo

RkJQdWJsaXNoZXIy MzI3MzI=