De la teología a la ciencia • Sexualidad: Hildegard hablaba de las relaciones sexuales sin tapujos. Para Hildegard, «La mujer podrá estar hecha del hombre, pero el hombre no se puede hacer sin una mujer». Los hombres y las mujeres son complementarios y, por ello, deben mantener una relación de equilibrio y completud en el matrimonio. A su vez, los hombres deben desarrollar su lado femenino y las mujeres su lado masculino. Aunque como buena monja defendía la castidad, consideraba la sexualidad como algo positivo y no la reducía a la procreación. El acto sexual lo considera como algo bello y ardiente. Afirmaba, contra la creencia habitual en la época, que la infertilidad no solo deriva de las mujeres, sino también de los hombres. Llama la atención que Hildegard, una monja, defendiera el placer sexual femenino, algo que contradecía las costumbres y creencias de la época. Hizo la primera descripción del orgasmo femenino de la que tenemos conocimiento, con sus analogías y diferencias con el orgasmo masculino desde una perspectiva carente de valoración moral. Aunque algunas de estas ideas son bastante revolucionarias, cabe no olvidar que condenaba la homosexualidad, afirmaba la sumisión de la mujer y condenaba la masturbación, manteniendo en general una posición bastante ortodoxa con respecto a la sexualidad. • Filosofía: la filosofía es para Hildegard un saber global que unifica todos los demás saberes, junto a la fe, que lleva al conocimiento de Dios; entre ambos posibilitan los demás saberes. Su filosofía parte de las visiones y audiciones, que consideraba su primera fuente de conocimiento, lo que la incluye dentro de la tradición mística, como san Juan de la Cruz y santa Teresa de Jesús. Su cosmovisión se relaciona con Boecio y con los neoplatónicos. El ser humano no se halla frente al mundo, sino inmerso en él. El ser humano tiene un nivel superior al resto de seres por encontrarse en contacto con Dios. Respecto a la relación entre cuerpo y alma, aunque considera el alma superior e inmortal, esta necesita del cuerpo para la acción. COMPARACIÓN DE DOS DOCUMENTOS Documento 1 «Y he aquí que en el año cuadragésimo tercero de mi vida, encontrándome unida a la celestial visión con gran temor y ánimo trémulo, vi un gran resplandor, en medio del cual se oyó una voz del Cielo que me decía: Oh frágil ser humano, ceniza de ceniza y podredumbre de podredumbre, di y escribe lo que ves y oyes. Pero, porque eres tímida para hablar, simple para exponer y carente de estudios para escribir estas cosas, dilas y escríbelas no según la palabra humana ni según la demostración racional y tampoco de acuerdo con las reglas de la retórica, sino que aquello que tú ves y oyes en las alturas celestiales, en las maravillas de Dios, así debes exponerlo, al modo como también el alumno que oye las palabras de su maestro las da a conocer según el discurso de aquel: como lo quiere, lo manifiesta y lo prescribe. [...] Las visiones que vi no las percibí en sueños, ni durmiendo, ni en delirio, ni con los ojos o los oídos corpóreos del hombre exterior, ni tampoco en lugares ocultos sino que, despierta y con la mirada atenta, las recibí en el puro espíritu, con los ojos y los oídos del hombre interior y en lugares abiertos, según la voluntad de Dios.» Hildegard von Bingen. «Declaración de las verdaderas visiones que fluyen de Dios», en Scivias. Miño y Dávila Editores Documento 2 Cuestiones 1. ¿Qué idea quiere comunicar la autora en este texto? 2. Describe la imagen, sus personajes, la posición que ocupan ¿Qué quiere transmitir? 3. ¿Qué elementos comunes encuentras en ambos documentos? Frontispicio de Scivias. Hildegard recibiendo y dictando una visión, mientras dibuja en una tablilla. PELÍCULA: VISIÓN Si te ha interesado la vida y obra de Hildegard von Bingen, aquí tienes Visión, una película sobre su vida: 158 8 Diálogo
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