De la teología a la ciencia El agustinismo dominó la filosofía medieval desde el siglo iv hasta el siglo xiii. En el siglo xi hubo una disputa entre dialécticos y antidialécticos, que provocó reacciones, una vez más, contra la filosofía y las ciencias profanas. Los dialécticos abusaron del argumento y de la demostración y pusieron por encima de las creencias la dialéctica; por contra, los antidialécticos, como Pedro Damián (1007-1072), afirmaron la superioridad de la teología sobre la filosofía. La obra de Anselmo de Canterbury continuaba el perfeccionamiento del agustinismo, que desembocó en el franciscano Buenaventura. En este siglo surge también lo que se conoce como la «mística medieval», la búsqueda del contacto y unión con Dios a través del amor cristiano. El conocimiento necesario para el hombre –la mujer tenía vedado el acceso a estos saberes– se encontraba en las Sagradas Escrituras, y el conocimiento de la naturaleza no era considerado necesario. En ese ambiente intelectual, aparece la figura de Hildegard von Bingen, la «sibila del Rin». Debido al contacto con la filosofía árabe y judía, a través de las escuelas de traductores de Occidente, se produce en el siglo xii un giro hacia el aristotelismo que posibilitó que el siglo xiii se instituyera como el gran siglo de la escolástica. Recordemos que la escolástica tenía como principal característica un método de enseñanza basado en las llamadas «artes liberales»: gramática, dialéctica (o filosofía), retórica, aritmética, geometría, música y astronomía. Este método tuvo como consecuencia el desarrollo de un lenguaje riguroso y técnicas argumentativas cada vez más exigentes. La escolástica no se redujo a la teología, sino que abarcaba otros saberes como la física. El interés por compatibilizar la recién descubierta filosofía aristotélica con la verdad revelada de la teología hizo que poco a poco esta visión del mundo se resquebrajara. Todos estos ingredientes contribuyeron a que en este periodo se fueran gestando las bases que posibilitaron la posterior revolución científica. 1 CONTEXTO HISTÓRICO Clérigo, guerrero y labrador, los tres órdenes medievales. Letra capitular de un manuscrito. En el año 800, Carlomagno fue coronado emperador de los romanos por el papa. El monarca franco se erigió en el gran defensor de la Iglesia y se inició un nuevo periodo político e intelectual en Occidente en el que poder político y poder religioso fueron de la mano. A pesar de ser analfabeto durante casi toda su vida y en un contexto en el que la mayoría de la población lo era, Carlomagno promovió la creación de escuelas en los palacios y monasterios, movilizando a los clérigos, que eran los que sabían leer y escribir. Además, promovió reformas urbanísticas y artísticas, y revitalizó el poder europeo con sus conquistas y reformas. Por ello, esta época se conoce como el Renacimiento carolingio. INVESTIGACIÓN Y DISERTACIÓN ¿Existen teocracias en la actualidad, es decir, países en los que el poder religioso y el poder político están en las mismas manos? ¿Crees que la religión tiene todavía influencia en el poder político? Esta noticia os puede ayudar: 1. Disertación: ¿Puede ser un gobierno plenamente democrático si tiene en cuenta una religión como la predominante? 149 8 Diálogo
RkJQdWJsaXNoZXIy MzI3MzI=