Cuestiones fundamentales en la filosofía medieval. Entre la luz y la oscuridad • Escuela de Alejandría: Como vimos en las páginas dedicadas al helenismo, la ciudad de Alejandría del siglo iii d. C. era una ciudad cosmopolita y centro científico y religioso en el que se reunían cultos egipcios, romanos, judíos y cristianos con el saber más erudito de la época tanto en medicina, como en astronomía, matemáticas, filología, etc. Alejandría fue también un centro de reflexión importante de los filósofos cristianos. En dicho ambiente intelectual, autores como Clemente de Alejandría y Orígenes trataron de conciliar la verdad revelada del Antiguo Testamento con la filosofía antigua. –Clemente de Alejandría (150-215 d. C.): de padres paganos, se convirtió al cristianismo tras abandonar el politeísmo. En su obra Protréptikos buscaba convencer a los paganos del error de su religión y que descubrieran la verdadera religión, el cristianismo. Por su parte, en el Pedagogo, Clemente quiere enseñar a los convertidos en qué consiste el buen camino del cristiano, la vida buena basada en la verdad que propone la religión cristiana. Camino que está abierto a todos, no solo a unos pocos (como decía el gnosticismo). Este camino es el de una vida sencilla y austera, de renuncia a los lujos. Para Clemente, la fe sola se basta para llegar a Dios, no requiere del conocimiento. A su vez, Clemente avanza una idea que posteriormente encontraremos en Agustín de Hipona, y que ya vimos anteriormente en Sócrates: que para obtener el conocimiento es necesario conocerse a sí mismo. De ese modo, a través de la introspección, se llega al conocimiento de Dios. En los Strómata, Clemente valoraba positivamente la filosofía y la razón y pensaba que era el primer paso para poder creer en Cristo y llegar a la verdad revelada. Si hay filosofía, si ha habido también un Antiguo Testamento para los judíos, es porque Dios lo ha querido. Por tanto, la filosofía es una propedéutica, una preparación, para encontrar la fe. Pero no toda la filosofía sirve a la verdad del cristianismo: Epicuro, por ejemplo, es condenado por Clemente por ateo y hedonista. Biblioteca de Alejandría. Dibujo de O. Von Corven. COMENTARIO DE TEXTO «[Las ciencias] Preparan para recibir la palabra de Dios y contienen lo que, en diferentes tiempos, ha sido dado a cada generación para su provecho; pero acontece que algunos, embriagados por el brebaje de las esclavas, han olvidado a su ama, que es la filosofía. Algunos de ellos han encanecido en el estudio de la música, otros en el de la geometría, otros en el de la gramática, y muchísimos más en el de la retórica. Ahora bien, de igual manera que las artes liberales–o según se dice, enciclopédicas– sirven a la filosofía, que es su señora, la filosofía misma tiene por fin preparar para la Sabiduría. Efectivamente, la filosofía no es más que una aplicación de la Sabiduría, ciencia de las cosas divinas y humanas y de sus causas. La Sabiduría es, pues, la señora de la filosofía, del mismo modo que la filosofía lo es de las ciencias que la preceden.» Clemente de Alejandría. Stromata Fragmento extraído de La Filosofía en la Edad Media Étienne Gilson. Gredos Cuestiones 1. ¿Cuál es la tesis o idea principal del texto? 2. ¿Qué quiere decir la afirmación «la filosofía tiene por fin preparar para la Sabiduría»? 3. ¿Cómo se ordenan los saberes según Clemente de Alejandría? 4. Disertación: ¿Qué fin tiene la filosofía hoy en día (si es que tiene alguno)? ¿Cómo se relaciona con otros saberes? Justifica tu respuesta. 136 7 Diálogo
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